20 de diciembre de 2010

De vuelta a la infancia


Luego de la excelencia fílmica que la compañía Disney Pixar logró con Wall-E (2008) era casi una misión imposible realizar una película con ese tono, de esa factura y con aquella delicadeza. Quizás no al nivel perfecto de la historia del robotito perdido en la tierra, pero si superando a sus dos antecesoras, Toy Story 3 (2010) es la mejor película animada del año y una de las mejores en su género.
Es que las compañías Pixar Animation Studio y Walt Disney Pictures armaron un grupo de excelencia para contar la tercera parte de la trilogía de los juguetes que cobran vida, sin que los humanos se den cuenta. El triunvirato responsable de la historia está integrado por Lee Unkrich, director, quien también participó como co-director de los filmes Buscando a Nemo (2003), Monster Inc. (2001) y Toy Story 2 (1999); John Lasseter, director de Toy Story (1995), Toy Story 2 y Cars (2006); y Andrew Stanton, quien estuvo a cargo de Wall-E. Como se ve, un equipo que desde el vamos tenía todo para hacer algo fuera de lo convencional.
La historia de Toy Story 3 es sencilla. Andy, el nene de la primera y la segunda película, ya es un adolescente que tiene que ir a la universidad. Entonces su madre le da a elegir: o se deshace de sus juguetes para donarlos a alguien que los vaya a usar o los guarda ordenadamente en el ático. Como siempre, distintas situaciones (típicas de las más inocentes comedias de situaciones norteamericanas) provocarán que el grupo legendario de juguetes vaya a un lugar al cual no tendría que haber llegado.
Párrafo aparte merece la calidad narrativa con la que está contada toda la vida de Woody, Buzz Lightyear y sus amigos en la guardería en la que accidentalmente caen. Este lugar, si bien parece una cosa al comienzo, termina siendo un nefasto campo de concentración para los juguetes, comandado por un oscuro dictador en la piel aparente de un oso de peluche, sedoso, buenazo y de color rosa. 
Toy Story 3 es una historia humilde, entretenida, bien contada, que no apela a clichés, cosa que sí hacen otras películas infantiles. Con personajes conocidos y una técnica realmente impecable, este film está dentro de los cinco mejores en su género. Su inocencia, su mensajes sobre la infancia y la amistad y su capacidad para atrapar al adulto en su narración, va de la mano con la excelente recepción que tuvo tanto en la crítica especializada como en la taquilla. 
Con un presupuesto de alrededor de 200 millones de dólares, esta película se convirtió en la más exitosa de las productoras Disney y Pixar superando la recaudación en más de 1.050 millones de dólares en el mundo. Asimismo se tuvo récord la recaudación que hizo en su primer fin de semana de estreno: algo más de 110 millones de dólares. Es decir que en sus primeros días recuperó la mitad de la inversión.
Teniendo en cuenta el final, será complicado que los productores hagan una cuarta parte. Seguramente los acordes musicales que dicen "yo soy tu amigo fiel" se van a extrañar.

3 comentarios:

  1. Si bien me gustaron más la 1 y 2 debo reconocer que el final me hizo llorar...
    Muy linda la nota martincho... congratulation!!!

    ResponderEliminar
  2. Debo decir que el final es lacrimógeno, si te metiste en la historia de las otras películas. Es así. Y gracias por las felicitaciones Georgina!

    ResponderEliminar
  3. Wall-E se la come, Woody se la da.

    Aclarado esto, si, coincido, la peli ta linda.
    Técnicamente esta todo lo bien que tiene que estar, ya no creo que valga la pena resaltarlo.
    Y si hicieron unos billetes o no, tampoco creo que venga al caso.
    Quedemonos con que es una linda historia, bien contada, con personajes que ya queremos y nos regalan buenas situaciones que seguro reviviremos mil veces en repeticiones por cable.
    Llorar con el final e de topu, el macho argento hace puchero y se la banca je.

    Chau, me voy a ver Megamente

    ResponderEliminar